18 de diciembre de 2009
Mujeres SoHo
Yanina Mendoza en Santander
Para ver el video detrás de cámara de esta sesión de fotos debe tener a la mano la edición 116 de la Revista SoHo, para ver cómo cobra vida la modelo.
Por: Fotografías: Raúl Higuera © 2009Para ver el video detrás de cámara de esta sesión de fotos debe tener a la mano la edición 116 de la Revista SoHo, tener una webcam y apuntar el ícono que aparece en la página 188 junto a la modelo a la cámara web de su computador en este link. Haga click acá para entrar y ver detalladamente las instrucciones.
Es casi un milagro que estas fotos se hayan podido hacer, porque Yanina dejó Colombia muy joven, a los 18 años, para probar suerte en México. Su plan era ir por cuatro meses y se quedó cuatro años. Y ahora no solo no tiene planeado volver a Colombia, sino que está a punto de mudarse a Los Ángeles.
Por partes. Empezó a modelar a los 13 años, con 16 y sin haberse graduado del colegio trabajó en la colección de novias de Francesca Miranda. Se mudó a Bogotá, empezó a estudiar Publicidad y Mercadeo y antes de empezar segundo semestre le salió la oportunidad en el Distrito Federal. Allí ha hecho campañas y desfiles, aunque a sus 22 años cree que está de salida en esto del modelaje: Yanina ya no hace castings y solo trabaja cuando la escogen a ella directamente. Tiene la marca de ropa Holy G, con almacenes en Colombia y en México, y trabaja en la dirección de imagen de los partidos políticos mexicanos PRI y PSD.
A Los Ángeles se va a estudiar Producción de Cine y Actuación. Es por un tiempo, pero conociéndola, es mejor guardar bien estas fotos. Antes de emprender su propia versión del sueño americano, Yanina volvió a su tierra para posar como un elemento más de estas postales de Santander. Recorrió las calles de roca roja de Barichara, uno de sus lugares favoritos. El pueblo de 8000 habitantes se encuentra en una meseta a 1300 metros de altura, conserva toda su arquitectura original de los siglos XVIII y XIX en piedra y fue declarado Monumento Nacional. Dicen que es el más bonito de Colombia. Con Yanina en sus calles, seguro que sí.
A menos de media hora de allí, posó en El Matrimonio, en el Parque El Gallineral, en San Gil. El Matrimonio son dos árboles entrelazados, un higuerón —el macho— y una ceiba —la hembra— de más de 300 años de vida. A orillas del río Fonce, donde los turistas practican rafting, El Gallineral tienen cuatro hectáreas de extensión y sus centenarios árboles con musgos colgantes le han dado fama a la región.
En el Parque Nacional del Chicamocha, Panachi, Yanina se convirtió en una escultura más del Monumento a la Santandereanidad, una colosal obra de 36 figuras y 100 toneladas del maestro Luis Guillermo Vallejo. Panachi es un enorme parque convertido en realidad junto al cañón del Chicamocha, que cuenta entre muchas atracciones con un teleférico de más de seis kilómetros de recorrido y 39 góndolas, cada una para ocho pasajeros. Panachi es el eje del crecimiento turístico del departamento, que se había empezado a desarrollar con el nacimiento de Yanina, hace 22 años.